¿Quién dijo qué iba ser fácil? Ver estás fotos y tener casi mil recuerdo por segundo, reír como tonto y decir, CÓMO HICE ESTO, POR QUÉ, COMO PUDE SER ASÍ, ¡BOM! Toda mi vida en un instante; ya son cuatro años, llenes de felicidad, tristeza, rabia, estrés, miles de sentimientos incomparables, sólo sé, qué me siento orgullosa de haber dejado un pedacito de mí en este lugar, como también muchas de las personas que pasaron he hicieron en mí un cambio por insignificante o pequeño que fuera, crearon en mi algo nuevo y reestructuraron mi perpectiva para que madurara y creciera; además de que dieron una partecita de sí mismos por verme progresar.

OCTAVO CUATRO

Este fue el punto de partida; qué no paso ese año, primero que todo el cambio tan brusco en el sentido metodológico, no estaba acostumbra a los equipos, además a soportar personas que no querían trabajar, considero que esta ha sido lo más duro durante todo este tiempo. Por otra parte todo el proceso tuvo su pro y contras, pero me siento feliz, ya que esto me dio un impulso por seguir adelante en la institución por complicado que fuera. 

NOVENO GRADO

Quizás fue uno de los momentos donde comencé a transformar esa niñada en ideas un poco más centradas y maduras, en el sentido académico no era el mismo de antes, pero considerablemente era bueno, en ese 2012, pase por instantes malucos, pero en un sentido propio, eran los cambios en carne propia de la pubertad a la adolescencia.  

DÉCIMO GRADO

En definitiva, aparte de octavo aunque fuera el inicio, décimo creo que me dejo  trauma craneoencefálico, qué guerra, cambie por tercera vez de equipo y cada vez comprenderme a mí misma era más complejo; En verdad, la tercera es la vencida eso dicen, pero creo que ese año me deshidrate de tanto llorar por la verraca inconformidad que mantenía, ahora es comprensible, pero no todo fue negativo, aparte de la metamorfosis forzosa; Algo si sé, pase unos momentos que en definitiva quedaron marcados en mi memoria,  el trabajo en equipo en esa instancia fue complicado, pero ahora que lo veo, no estuvo mal, valió la pena desgastarse por un momentico, ahora no, pero obvio, sigo con FITO-MINAS,  le dieron una media vuelta a la cabeza de Valentina, ahora está menos cuerda, pero anda feliz con sus bobadas. Como siempre digo ahora dejo todo en manos del destino, obviamente dando de mí para que todo se pueda cumplir, con mente positiva, aún preocupada porque todo salga bien, pero es hora de creer lo que hay dentro de mi ser. 

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